Invierno florido

Existe una gran variedad de coloridas y perfumadas especies que florecen con el frío.

Una de ellas son los Laurentinos; que florecen en una especie de ramo blanco que se contrasta con su follaje verde oscuro.

Otras son las populares Magnolias, perennes, cuyo desarrollo es mejor en suelos frescos y permeables. Aguanta los fríos intensos y puede ubicarse a media sombra, aunque prefiere estar al sol. No hace falta regarla mucho, con las lluvias es suficiente. Si bien soporta temperaturas muy bajas, hay que tener en cuenta que debe ser protegida de los vientos invernales, ya que sus ramas son frágiles.

También en invierno encontramos a la Begonia, con abundante floración y llamativos colores, se desarrolla en lugares de poca sombra y mucha humedad ambiental; y a la Camelia, que posee un lustroso follaje y flores super coloridas que van de los tapices rojos al blanco.

Por último, las trepadoras invernales más bonitas son la Bignonia Naranja y el Jazmín de Invierno, ambas con un aroma y color característicos.


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